El post de hoy es muy especial y la vez difícil de escribir.
Especial porque elegir el vestido de novia, es algo realmente especial, emocionante e increíble y difícil porque como todos sabéis es el secreto mejor guardado de una boda y me muero por explicar mil cosas y dar detalles pero me tengo que morder la lengua!!!! Pero si puedo compartir mi momento, el momento en el que sentí que había encontrado mi vestido! Porque las que ya lo habéis elegido me entenderéis y las que no quizás os ayude un poco mi experiencia.
Tengo que confesar que me encantan los vestidos de novia y desde hace años aunque ni me imaginaba que fuera a casarme miraba, seleccionaba mis vestidos favoritos y me imaginaba con ellos. Pero cuando llego el día de ir en busca de mi vestido me entró una especie de pánico, una cosa es mirar y otra verte con un vestido de novia. Yo solo pensaba ¿cómo me veré con un vestido de novia? ¿Y si no me gusto? ¿Y si no encuentro ninguno que me guste? Y eso es lo que me pasó el primer día… fui a una tienda muy pequeñita donde había miles de catálogos de varias marcas y tenía que seleccionar 5 vestidos por catalogo, me probé esos 5 y 5 más!! ¿porqué? ¡¡Porque a todos les sacaba un pero!! ¡¡A todos!! No había uno que me gustará, si me gustaba el estampado no me gustaba el escote, si me gustaba el escote no me gustaba la cola, si me gustaba la cola no me gustaba el volumen y así con los más de 9 vestido que me probé. Y ese día salí muy decepcionada, y pensando: ya decía yo que eso que dicen que se siente que es tu vestido no es verdad!
Pero en la segunda tienda a la que fui todo cambió. Y la primera cosa que cambió es que la dependienta me dijo no te pruebes solo vestidos de la idea que llevas, una cosa es la idea que llevas y otra como te ves con él puesto. Nunca nos hemos visto con un vestido de novia y no sabemos cómo nos queda hasta que nos lo probamos. ¡Y sinceramente es el mejor consejo que me pudo dar! Me probé un vestido del estilo que yo llevaba y me encantó, era perfecto, no le sacaba ningún pero y la ilusión volvió a mi, empecé a sentir que tenía vestido! Mi madre y mi tía que me acompañaron pensaron exactamente lo mismo que yo. Pero es que cuando me probé “el vestido” el que era totalmente diferente a la idea que yo llevaba, y cuando digo totalmente es totalmente, tela, escote, cola, estampado, TODO!! Lo que sentí no lo puedo explicar con palabras, solo puedo decir que lo sentí, sentí que era mi vestido! Sentí el sentimiento que dicen tantas chicas que se siente y que creía que nunca iba a sentir! Y las chicas que me ayudaban a probármelo me dijeron uiii esa sonrisa!! Y cuando salí del probador y mi madre me vio lo sintió igual que yo. Solo con la sonrisa que le salió al verme, las dos nos dimos cuenta que este era “el vestido”.
Tengo que decir que aún así dudé, peor dudé por el simple echo que el primer vestido era el estilo que llevaba en mi cabeza, el estilo del que tantas fotos había guardado como favoritas, y “el vestido” era lo contrario, pero las chicas de la tienda a las que tengo que agradecer su paciencia me volvieron a probar los dos, me hicieron caminar por la tienda con ellos, sentarme, subir escaleras sentirme cómoda. Me probaron otros vestidos para descartarlos sin probármelos pero no, ya ninguno me gustaba. Quien me lo iba a decir, yo que creía que nunca lo sentiría ahora tenía dos vestidos que me gustaban!! Pero queréis que os diga qué fue lo que me hizo decidirme? Los dos eran preciosos, me quedaban genial y me favorecían mucho, eran la noche y el día, pero con uno de ellos me sentía YO, con mi personalidad y mi estilo y me decidí! Me salió de dentro y les dije a todas ¡¡¡Habemus vestido!!! Y no me lo quería quitar!!! Me hubiera quedado con él puesto hasta el día de la boda!!
No quise ir a ningún sitió más, anulé las citas que tenía en otras tiendas. Había encontrado mi vestido. Tengo que deciros que las dependientas en mi caso fueron importantísimas para mi y chicas de Barcelona si aún no tenéis vestido ir a Noa’s Weddings son un encanto y os van a ayudar a encontrarlo!
Ahora me quedan unos meses para volver a verme con mi vestido puesto en la primera prueba, pero cada vez que miro la foto me enamoro más y estoy tan tan segura que a Iñaki le va a encantar que me emociono solo con pensarlo! Quiero que me vea con él puesto!
1Millón de veces si
by Sylvia
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